La idea de alojarse en un castillo desata la imaginación: un mundo refinado en medio de la naturaleza. ¿Contemplar paisajes que cortan la respiración desde una torre cargada de historia? …experiencias que se viven despacio.

Hemos seleccionado para vosotros espléndidos edificios de los siglos XV y XVI que parecen concebidos para hacer una escapada romántica. Castillos que han sido protagonistas de la historia de Francia que se han embellecido a lo largo de los siglos y rodeado de jardines de estilo francés con vistas a las aldeas vinícolas de la región. Habitaciones decoradas a la perfección con camas con dosel, chimeneas, bañeras con patas y grandes ventanas.

La vida en los castillos

Vivir en un castillo es regalarse un momento para saborear un té frente a la chimenea, olvidarse del reloj y dejar correr el tiempo en el spa, sucumbir a la delicadeza de sus restaurantes gourmets, disfrutar de las veladas musicales en elegantes salones, dar un paseo en bicicleta o simplemente jugar a salir del laberinto del jardín.